Francia se proclamó por primera vez campeona del mundo en su casa, en el monumental Stade de France, en Saint-Denis, inaugurado solo unos meses antes del Mundial y ante 80.000 almas que vieron cómo Zidane y compañía goleaban a la poderosa Brasil de Ronaldo.

La estrella de Brasil, entonces en las filas del Inter, estaba siendo el mejor jugador del torneo, pero horas antes de la final sufrió convulsiones en el hotel de concentración y estuvo a punto de ser baja. Finalmente, tras pasar una revisión en el hospital, jugó el partido, pero apenas pudo destacar. Se especula con que ese extraño episodio lastró el rendimiento de todo el combinado brasileño.

El Mundial de Francia'98 fue el primero con 32 selecciones participantes y también el primero con gol de oro en la prórroga, una regla que ayudó a Francia a eliminar a Paraguay en octavos de final con tanto de Blanc.

Para España este torneo fue un batacazo enorme porque no superó la primera fase en un grupo que compartía con Nigeria, Paraguay y Bulgaria. La derrota en el debut contra el combinado africano (2-3) se recuerda por un clamoroso error de Zubizarreta.