La escudería de la bebida energética es relativamente joven, ya que compite en el Mundial de Fórmula 1 desde el año 2005 cuando compró la estructura de la desaparecida escudería Jaguar. Pero a pesar de su juventud, Red Bull no ha tardado en convertirse en un equipo puntero liderado por su ingeniero Adrian Newey, el gran gurú de la aerodinámica. El equipo ha conseguido cuatro títulos mundiales, que logró de forma consecutiva entre 2010 y 2013 con Sebastian Vettel al volante.

El piloto australiano debutó en la Fórmula 1 en 2011 con Toro Rosso y poco a poco fue progresando bajo el paraguas de Red Bull. Permaneció en el equipo filial hasta 2014, año en el que debutó con el primer equipo de la bebida energética junto a Sebastian Vettel. Ese fue, además, el año de su consgración porque finalizó tercero el campeonato, por delante de su compañero alemán y tetracampeón mundial.

Es el nuevo niño prodigio de la Fórmula 1. Joven y sobradamente preparado, el piloto holandés ha tardado muy poco en dar muestras de su gran talento y tiene ya una legión de seguidores. Debutó en el Mundial en 2015 con Toro Rosso, con solo 17 años, y a mitad de la temporada 2016 ascendió a Red Bull. Su debut con el primer equipo energético fue a lo grande porque lo hizo ganando el GP de España. Desde entonces se ha convertido en la gran estrella del equipo.