Por su parte, las zonas más secas fueron Liébana, Campoo y Alto Pas y Besaya, mientras que las mayores precipitaciones se localizaron en la costa central y oriental, según la Agencia Estatal de Meteorología.

De acuerdo con la AEMET, el mes de junio comenzó en la región con temperaturas "algo superiores" a lo normal y que se fueron haciendo aún "más elevadas" hacia el final de la primera decena, con valores máximos entre 25 y 30 grados en muchos puntos, especialmente los días 7 y 8 y en zonas interiores. Hubo también algunas precipitaciones débiles, "de poca importancia".

En la segunda decena se registraron las precipitaciones más importantes del mes entre los días 14 y 18, así como un descenso "muy notable" de las temperaturas, con valores en numerosos puntos de hasta 10ºC por debajo de lo que se dio al principio de mes. Las temperaturas mínimas no sobrepasaron los 5ºC en zonas de la Cantabria del Ebro, y nevó en zonas altas, por encima de los 1.600 metros el día 17.

En la tercera decena se formó la primera depresión térmica del verano sobre España, lo que elevó nuevamente las temperaturas máximas alcanzando o superando los 30ºC en varios puntos el día 22. En la última semana hubo frentes, aunque muy debilitados, acompañados de nubosidad y escasa precipitación.

La insolación recibida en Cantabria a lo largo del mes de junio estuvo en torno a 170 horas, valores muy próximos a lo normal. La temperatura máxima se registró el día 22 en Ramales, con 35,9 grados, y la mínima el día 1 en Cubillo del Ebro, de 1,5 grados.

Por su parte, la actividad tormentosa fue escasa, limitándose prácticamente al día 15 en la zona costera central y algunos puntos del interior. La mayor precipitación recogida en 24 horas fue de 28,3 mm, el día 14 en Terán.

El viento fue moderado, con las mayores rachas a mediados de mes, coincidiendo con las máximas precipitaciones, y sin sobrepasar nunca los 70 kilómetros por hora. La racha máxima, de 69 km/h, se registró en Santander el día 16.