Una miembro del grupo Pussy Riot, opositor al gobierno de Vladimir Putin, fue condenada este lunes a permanecer quince días de arresto por invadir en el estadio de Luhnikí durante la final del Mundial de fútbol.
La joven Veronika Nikúlshina saltó al campo durante la segunda parte del partido entre Francia y Croacia, que terminó con victoria del equipo galo (4-2).
Uno de los jugadores croatas, Dejan Lovren, se tomó muy mal la protesta e intentó retirar el campo a uno de los espontáneos, al que recriminó su acción.
Pussy Riot labró su fama en 2012 cuando dos de sus integrantes fueron condenadas a dos años de cárcel por interpretar una canción punk contra el presidente ruso, Vladímir Putin, en el principal templo religioso del país, la catedral de Cristo Salvador de Moscú.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios