Steven Tartt es un británico de 32 años que el pasado 3 de junio estaba de vacaciones en el hotel Victoria Playa de la isla de Menorca. Ese día, estando en la piscina del establecimiento, vio cómo un niño de 7 años y una niña de 6 se ahogaban. Se lanzó al agua y los salvó. Pero ahora, pide una compensación.
El diario Liverpool Echo recoge que Tartt quedó traumatizado por el hecho y que sus vacaciones quedaron "arruinadas". Dice que tuvo que pedir una semana más de vacaciones para recuperarse.
Por eso, reclama a su agencia de viajes una compensación porque el hotel no tenía socorrista y tuvo que ser él el que salvara a los niños. Tartt asegura que tiene pesadillas en las que se repite la escena pero no puede salvar a los pequeños.
Consultada por el Liverpool Echo, la agencia de viajes desestima la opción de compensar a Tartt y dice que lo que le ofrece es acceso a tratamiento psicológico si en efecto está traumatizado.
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