Alemania pedirá PCR para entrar al país y estudia un marco legal para prohibir los vuelos a ciertos destinos como Mallorca

La canciller de Alemania, Angela Merkel, tras una reunión con los jefes de Gobierno de los estados federados para analizar la evolución de la pandemia del coronavirus en el país.
La canciller de Alemania, Angela Merkel, tras una reunión con los jefes de Gobierno de los estados federados para analizar la evolución de la pandemia del coronavirus en el país.
FILIP SINGER / EFE
La canciller de Alemania, Angela Merkel, tras una reunión con los jefes de Gobierno de los estados federados para analizar la evolución de la pandemia del coronavirus en el país.

Alemania sigue estudiando medidas para frenar el virus durante las vacaciones de Semana Santa. Tras decretar un confinamiento total de cinco días y más tarde cancerarlo, ha optado por implantar desde este fin de semana un test obligatorio de coronavirus para entrar en el país por vía aérea, mientras la canciller alemana, Angela Merkel, ha incidido en que es difícil restringir los viajes al extranjero.

El Ministerio de Salud alemán ha avanzado que implantará la medida de pruebas negativas de coronavirus antes de abordar a los aviones que se dirijan al país desde las 00.00 horas (hora local) del domingo, en una acción para controlar la propagación del virus en el país, según informa el diario 'Bild'.

El debate sobre los viajes al extranjero se ha encendido en Alemania con motivo de las reservas para volar a destinos de vacaciones, como en el caso de Mallorca, en España. Sobre la posibilidad de restringir los vuelos, Merkel ha incidido en que "hay preocupaciones legales importantes y hay que tomarlas en serio".

El Gobierno alemán está considerando prohibir temporalmente los viajes a zonas populares de vacaciones en el extranjero, mientras la canciller ha pedido a los ministerios competentes que examinen las formas de hacerlo. "No podemos actuar ilegalmente", ha destacado al respecto, según recoge el medio alemán antes citado.

El país busca frenar una tercera ola en el país y en los últimos días ha estudiado medidas para ello. En los últimos días, la canciller alemana ha dado marcha atrás a un confinamiento estricto de cinco días anunciado para Semana Santa tras críticas recibidas por la falta de claridad sobre los elementos claves de dicho plan, un "error" que ha asumido a título personal.

En la última jornada, las autoridades de Alemania han confirmado más de 2,7 millones de contagios en el marco de la pandemia, según los datos recabados por el Instituto Robert Koch.

En concreto, el último balance ha dejado 2.713.180 positivos y 75.440 fallecidos, mientras la tasa de incidencia acumulada durante los últimos siete días es de 113,3 casos por cada 100.000 habitantes, con 94.252 contagios durante la última semana y cerca de 181.500 casos activos. Tras varias semanas de descenso, este indicador ha vuelto a ascender en los últimos días.

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